“Vemos un ejercicio fiscal (2012) en el que crecimos por encima de lo planificado (5,5%) y la meta inflacionaria quedó en el límite inferior de lo presupuestado (20,1%)”, destacó Merentes.
El Gobierno de Venezuela anunció la propuesta de una nueva medida económica: una reforma de la Ley de contribución especial por precios extraordinarios y exorbitantes en el mercado internacional de hidrocarburos. La propuesta de reforma modifica las bandas de distribución de las divisas provenientes de la industria petrolera, en la cual se aumentará el límite inferior de 70 a 80 dólares por barril.¿Cuál es el resultado buscado? Fortalecer las reservas internacionales. Así lo explicó el presidente del Banco Central de Venezuela (BCV), Nelson Merentes, durante la instalación del seminario “Sistema de Pagos: una perspectiva regional”, llevado adelante en el BCV. Con esta medida aumentarán las reservas líquidas, conformadas en divisas, por el orden de 2.487 millones de dólares anuales, de acuerdo a la estimación realizada por Merentes. Esto demuestra, como explicó, que “Venezuela tiene una fortaleza de ingreso en moneda de estilo (dólares) y está distribuido en diferentes sectores; lo que va al Fonden, a las reservas y lo que llega del Fondo Chino, es decir, es un sistema novedoso, otros países no lo tienen”.
El presidente del BCV destacó la fortaleza de la economía venezolana, un elemento que es de ser subrayado en un contexto marcado por la crisis que atraviesan los países de Europa y de la cual el continente americano no está inmune. Esta virtud de la economía fue destacada por lo que representa en términos de seguridad económica: “Vemos un ejercicio fiscal (2012) en el que crecimos por encima de lo planificado (5,5%) y la meta inflacionaria quedó en el límite inferior de lo presupuestado (20,1%).”
El otro elemento central al que se refirió Merentes es el destino del desarrollo, pues la distribución tiene que priorizar el aspecto social: “Lo importante es que en la distribución de los recursos, una parte importante tiene que ir a lo social, sin menospreciar la otras inversiones. Hay otro modelos (de desarrollo) que se basan en lo económico y financiero mientras crece la pobreza y la desigualdad, pero aquí vamos en sentido contrario”.
Por último, hoy resulta muy difícil pensar el desarrollo únicamente en términos nacionales, por lo que las alianzas geopolíticas y económicas tienen gran importancia. En ese sentido, Merentes destacó la importancia del Sistema Unitario de Compensación Regional de Pagos (Sucre), la unidad de cuenta común que impulsa el Gobierno de Venezuela dentro del proyecto estratégico de integración de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA): “Resulta importante porque hay que buscar nuevas formas de transar (bienes) de una manera más equilibrada y que se puedan realizar estos intercambios sin que tenga que haber una dependencia absoluta a las monedas convertibles (divisas como el dólar estadounidense)”.
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