Finalizada la extenuante labor humanitaria de repartir regalos a los niños que se portaron bien, el verdadero, único e indiscutible ícono de la Navidad, el querido y bonachón Santa Claus, ha entablado, ante la Corte Penal Internacional, una petición de anulación a la patente de registro sobre el uso ilegal del color rojo que el PSUV, ha venido utilizando como propio.
La corte internacional de La Haya, se encuentra en sesión permamente y con carácter extraordinario para apresurar la legislación y posterior sentencia al Partido Socialista Unido de Venezuela, antes de las elecciones municipales venezolanas, el próximo año 2013.

En cuanto a la pregunta del porqué la demanda del color rojo solo iba dirigida hacia el PSUV y no contra la empresa Coca Cola, Luis Ramón Lozinski, uno de los abogados del Fundador de la Navidad contestó: "Lo que pasa es que mi cliente, el señor Claus, es uno de los socios accionistas de The Coca Cola Company, y como se comprenderá, absolutamente todas las personas alrededor del planeta, relacionan el sentimiento de la Navidad con Santa Claus y la refrescante bebida de cola"
También, se le consultó directamente al dueño del Polo Norte, el mismísimo Santa Claus, sobre el porqué jamás pasaba a darle sus regalitos a los niños y niñas de los países Africanos, a lo que el inventor original de La Navidad, acomodándose su ancho cinturón negro, expresó en su típico tono jocoso y alegre: "Lo que pasa es, que en los vuelos internacionales, está totalmente prohibido llevar alimentos a bordo y eso es lo único que ellos me piden constantemente: comida. Por lo tanto, todos los Diciembres, tengo que devolverles sus carticas con una nota diciendo: 'Queridos pequeñines, por este año ustedes, otra vez, se volvieron a...Jo, Jo, Jo. ¡Feliz Navidad para Todos!".