El conocimiento antiguo ha sido sabiamente ocultado y ridiculizado por la ciencia. A día de hoy, ya nadie sabe apenas algo sobre lo que nuestros ancestros hacían, la magia que utilizaban, los contactos que realizaban.
Nuestros 'viejos' hermanos estaban integrados con la Naturaleza Viviente. Se comunicaban con sus espíritus. Mantenían contacto con los hermanos de las estrellas. Todo ello ha sido demostrado en descubrimientos arqueológicos que se han realizando.
Sin embargo, la gente permanece engañada, ignorante ante toda esta legendaria información y sabiduría. Y su poder y fuerza, son usados en secreto por aquellos que rigen el control en el mundo. Para dominar y esclavizar a una humanidad dormida e insensible, domesticada y hacinada en la materia.
Hemos de desaprender para aprender de nuevo. Mirar atrás, pero no con nostalgia, sino con ganas de aprender. Muchos creen que deberíamos volver a vivir en tipis, como los nativos americanos. Otros creen que lo suyo sería que viviéramos todos como campesinos, simplemente ocupándonos de la tierra, sin apenas tecnología a nuestro alcance.
Mas esos tiempos pasaron y aportaron lo que debían a sus gentes. A día de hoy, la tecnología es algo grandioso que podemos usar en nuestro beneficio si es dirigida bajo el auspicio de altos valores, tanto humanos, como morales y espirituales.
Fijémonos en el pasado para re-aprender el contacto con la Naturaleza, con el Espíritu que todo lo impregna y anima. Recordemos nuestros contactos con los Hermanos Mayores.
Hemos de desaprender para aprender de nuevo. Mirar atrás, pero no con nostalgia, sino con ganas de aprender. Muchos creen que deberíamos volver a vivir en tipis, como los nativos americanos. Otros creen que lo suyo sería que viviéramos todos como campesinos, simplemente ocupándonos de la tierra, sin apenas tecnología a nuestro alcance.
Mas esos tiempos pasaron y aportaron lo que debían a sus gentes. A día de hoy, la tecnología es algo grandioso que podemos usar en nuestro beneficio si es dirigida bajo el auspicio de altos valores, tanto humanos, como morales y espirituales.
Fijémonos en el pasado para re-aprender el contacto con la Naturaleza, con el Espíritu que todo lo impregna y anima. Recordemos nuestros contactos con los Hermanos Mayores.
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