viernes, 22 de febrero de 2013

YA LA OPOSICIÓN TIENEN CANDIDATO PRESIDENCIA: FERNANDO CARRILLO



Fernando Carrillo, que además de actor se ha dedicado al sector empresarial, manifestó que no ve viable, como empresario, invertir en Venezuela, sin embargo quiere ser presidente del país.

El actor Fernando Carrillo aseguró que aspira ser presidente de Venezuela en unos 20 años, al tiempo que se desmarcó de su conocida simpatía por la Revolución Bolivariana al afirmar “ahora yo quiero más soluciones”.

Durante una entrevista en el programa Cala, transmitida por la trasnacional CNN, Carrillo dijo que se está preparando en el exterior para alcanzar su objetivo de ser presidente de Venezuela dentro de 20 años. Llegando al extremo de compararse con El Libertador, Simón Bolívar.

“Siempre he sido bendecido fuera de la arena política. Lo que sí creo es que me voy a preparar como hicieron los grandes próceres como hizo [Simón] Bolívar que fue a estudiar al exterior, que creció y después volvió a Venezuela. Yo creo que me voy a preparar, en los próximos 20 años seré presidente de Venezuela”, dijo.

Aunque aseguró que no comulga con la extrema derecha, porque su padre fue detenido y torturado, y reconoce que el Gobierno Bolivariano “ha hecho cosas buenas” que deberían continuar, aseguró que “ahora yo quiero más soluciones, por eso he decidido no tocar más la política”, confesión que pretende marcar distancia con la Revolución Bolivariana, proceso político del que se había manifestado seguidor, y agregó “yo no quisiera opinar más si es bueno o malo y, a lo mejor, en unos 20 años tienes un amigo presidente”.

También se distanció del líder bolivariano, Hugo Chávez, cuando, al referirse a su estado de salud, dijo: “Yo lamento el estado del Presidente, yo respeto mucho a los seres humanos”.

Fernando Carrillo, que además de actor se ha dedicado al sector empresarial, manifestó que no ve viable, como empresario, invertir en Venezuela, sin embargo quiere ser presidente del país.

“No invierto en Venezuela porque hay una corrupción descarada, la forma de trabajar en otros países es mucho más organizada y la corrupción no llega a los niveles que llega en Venezuela, pero no pierdo las expectativas y las ganas. Yo quiero que mis hijos vivan en el país de donde es su padre, del cual me siento tan orgulloso y en algún momento, invertiré”.

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